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María Marta Liébana, Argentina

María Marta Liébana

La autora es Técnica Universitaria en Administración de Empresas y reside en la Resistencia – Chaco.

Su pasión por la poesía comenzó

hace más de treinta años.

 

La producción realizada hasta la fecha supera dos mil obras, varias fueron premiadas en diferentes concursos; incluidas en más de un centenar de antologías internaciones y proclamadas en diferentes medios radiales.

 

Ha publicado en Internet el poemario

“Amor Apasionado” (2015) y un relato titulado “Una carta desde la eternidad” (2016).

Expone parte de sus obras en las redes sociales; en su blog personal y en su canal de YouTube.

 

Ha participado en diferentes actos de premiación en Argentina; en Ferias del Libro de su provincia; en la Feria del Libro de Asunción 2016 y en el Encuentro de Escritores del Mercosur en Hernandarias (Paraguay) en 2017.

 

Es Secretaria de la Academia Argentina de Literatura Moderna; Asociada a la Sociedad Argentina de Escritores de la Provincia del Chaco y de la localidad de Mercedes (Bs. As.) y colaboradora de la Unión Hispanomundial de Escritores – Filial Chaco.

 

 

CLAMORES POR LA PAZ (Décima)

 

Despiertan la amada tierra

los clamores por la paz

envueltos de aura fugaz

surcando el cielo la guerra

almas en duelo destierra

gritos ahogados nacen

ante miedos que subyacen

del profundo corazón

que encuentra la sinrazón

de presencias que solacen.

 

SOR TERESA

 

Sor Teresa de Calcuta

un ejemplo de hermandad

profunda espiritualidad

e indoblegable voluntad.

 

Misionera de la caridad

el prójimo fue su desvelo

pobres; ancianos y enfermos,

marginados de la sociedad.

 

Portadora del amor

silencio, generosidad,

clemente en el dolor,

Premio Nobel de la Paz.

 

CÓMO OLVIDAR DE NERUDA

 

Cómo olvidar de Neruda

los versos de sus poemas

si destilan emociones

al borde de la locura.

 

El eco de sus sonetos

aún suenan en el viento

y en el alma se resguardan

oleadas de sentimientos.

 

Cómo olvidar me pregunto

si el amor aún no ha muerto

aunque triste se haya ido

el corazón de este pecho.


 

PUERTA A LA ESPERANZA

 

Una puerta al infinito

una puerta a la vida

lo que el tiempo destina

y aquellos pasos cortitos

van haciendo camino.

 

La aventura del destino

la sorpresa que espera

detrás de una puerta abierta

la vida, con brazos abiertos

abriga las esperanzas eternas.

 

LOS AÑOS PASAN

 

Los años pasan y las presencias

se transforman en ausencias;

la juventud en madurez;

la salud en flacidez;

las alegrías en nostalgias;

los amores en desamores

y los minutos en tiempo deshojado.

 

Nos queda la experiencia entre las manos;

la simpleza de lo sabio;

la certeza que, volver a empezar...

sería en vano.

Porque el tiempo pasa y no vuelve atrás.

Y que, aunque quisiera,

ya nada será igual.

 

ENTRE LETRAS

 

Cuando el tiempo peine la nieve de mis cabellos

cuando el silencio escribiere en el aire mis versos

la esencia del universo correrá entre letras

las pasiones que destilan las musas eternas.

Entre pequeñas rendijas de luces y sombras

se deslizan los misterios de dulces historias

de amores que se fueron y que nunca volvieron

de ese fuego que arde y reaviva los secretos.

La pluma ya no escribe, la pluma se escapa

saltando las líneas de la piel y hojas blancas

en perfecta danza de sonetos y rimas

de sinalefas que unen eterno con vida.

Perfume de rosas y agua de azahar volcarán

sobre mi cuerpo arrebolado de melancolía,

de cascarones de tristeza se desprenderá

la miel que brota de tu ser, una bella poesía.


DEL OTRO LADO DEL ESPEJO

 

A veces, en la vida, tenemos que poner la mejor cara de alegría,
ocultando tras el maquillaje las tristezas, las angustias y las decepciones.
De afuera, una sonrisa, en el corazón la soledad que se filtra a través de los ojos, esos ojos con un brillito de ilusión. Nos miramos al espejo y vemos ahí… la nariz roja,
pero si levantamos la vista nos percataremos que detrás nuestro hay un camino abierto
de nuevas esperanzas y un nuevo sol.

 

SEGUIR  

Nos caemos; nos levantamos y seguimos.

Nos detenemos; pensamos y seguimos.
Lloramos; nos enjugamos y seguimos.
Nos peleamos; nos amigamos y seguimos.
Ignoramos; estudiamos y seguimos.
Perdemos, ganamos, pero seguimos.
Siempre adelante; siempre con la frente alta, aunque el corazón duela;
las lágrimas se sequen en el alma o las nubes grises no dejen ver la mañana, seguimos.
Porque de eso se trata la vida.

De seguir viviendo.